Una pareja
de enamorados se encontraba viendo una película en el cine. Los dos muy
acarameladitos, se besaban y se abrazaban. Todo muy bonito, como todo en el
principio.
En eso el
novio le dice a su noviecita: “¡Ay mami! ¿De quién es esa boquita tan bella?”
A lo que la
novia le responde: “Tuyita mi amor, tuyita.”
El novio
contento por la respuesta, continua su cuestionamiento: “y ¿de quién son esos
ojitos hermosos?”
“Tuyitos
papi, tuyitos.” Dice la novia con mirada enamorada.
Ya el
muchacho, tomando confianza, decide hacer una pregunta un poco más indiscreta: “¿De
quién ese culito sabroso?”
A lo que la
muchacha no responde e ignora completamente.
Atónito y
sorprendido, el novio decide preguntar de nuevo: “Mi amor, que ¿de quién es ese
culito?”
Su novia continúa
ignorando.
Ya el
muchacho comienza a sospechar y su paciencia se le acaba, pero igual insiste,
aunque nuevamente su novia lo ignora y guarda silencio.
Ya
completamente enojado por su sospecha causada por el silencio de su novia, el
joven se levanta de su butaca y le grita: “QUE ¿¿¿DE QUIÉN ES ESE CULO???”
Y un
borracho que estaba sentado unas cuantas filas más atrás se levanta y grita: “¡ENCIENDAN
LA LUZ QUE SE PERDIÓ UN CULO!”
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